Por favor mañana no pienses ni un instante en mí
ni un segundo
no abras la boca
no des un paso
no seas tan blanca en la piel
no mires con esa osadía
no embellezcas el mundo
no seas tan bella
no hables
no perfumes mis alrededores
no me amenaces con tus pezones
no me abrigues a lo lejos
no seas de pechos, de nalgas, de cabello de yegua
por favor mañana no seas
por favor mañana, Lucia,
dejame dormir.